Sydney McLaughlin es sin duda la favorita para los Campeonatos del Mundo que tendrán lugar dentro de tres semanas. El sábado, durante las selecciones de Estados Unidos en Eugene (Oregón), la vigente campeona olímpica mejoró su récord mundial en los 400 metros vallas, con un tiempo de 51″41, mejor que el que marcó en la final de los Juegos Olímpicos de Tokio el verano pasado (51″46).
Su rival Dalilah Muhammad, que la había vencido en los campeonatos del mundo de 2019 en Doha, se ausentó de los campeonatos de Estados Unidos por una lesión en los isquiotibiales. Pero McLaughlin no se privó de enviarle un mensaje. Y qué mensaje era. Porque la atleta de 22 años corrió cinco centésimas de segundo más rápido que en su final olímpica, que ganó por delante de … Muhammad.
Esta última, como defensora del título, podrá defender sus posibilidades en esta misma pista del Hayward Field, al igual que Britton Wilson (53″08) y Shamier Little (53″92), segunda y tercera en la final, muy por detrás de McLaughlin.
https://www.youtube.com/watch?v=8yR4sieU174
Esta gran actuación coronó una jornada en la que la gran Allyson Felix, 21 años después de su primera aparición, ofreció su última carrera en sus campeonatos nacionales.
En los 400 metros no consiguió una plaza en el Mundial, al terminar sexta (51″24) en una final dominada por Talitha Diggs (50″22) por delante de Kendall Ellis (50″35) y Lynna Irby (50″67), que defenderá los colores de Estados Unidos dentro de tres semanas. Sin embargo, la esperanza de que la siete veces medallista de oro olímpica de 36 años compita en su octavo Campeonato del Mundo no ha desaparecido. «Creo que podría estar en una buena posición para formar parte del relevo mixto o algo así», dijo la atleta mientras espera la selección antes de retirarse del deporte a finales de este año.
La plusmarquista mundial Keni Harrison se impuso en los 100 metros vallas con un tiempo de 12.34, la mejor marca del año, en ausencia de la actual campeona mundial Nia Ali, que podrá defender sus posibilidades en el Mundial.